Un final de año caldeado en la UCR. Por estas horas hay un clima de suma crispación en el centenario partido. Pero mientras todos los sondeos nacionales colocan a la fuerza política en guarismos muy bajos, incluso no llegando al 10 por ciento de los votos, se multiplican los candidatos presidenciales. (Impulso Baires)
El viernes lanza Ricardo Alfonsín en Capital Federal. Por eso, desde hace un mes, su comando electoral se comprometió a mover un piso de treinta mil personas. El lanzamiento del hijo del ex presidente estaba previsto para hace un mes, pero sin embargo el fallecimiento del doctor Néstor Kirchner prorrogó el evento.
Por otra parte, el martes último hubo una reunión “clave” de los sectores bonaerenses que apoyan al vicepresidente Julio Cobos, y decidieron seguir adelante demostrando fuerza, y por esa razón el 13 de este mes van a ir a Vicente López a hacer una demostración, y así mojarle la oreja al intendente de ese lugar, el histórico Enrique “Japonés” García, un hombre que resultó clave para la victoria alfonsinista el pasado 6 de junio en la interna radical bonaerense.
En el armado del cobismo está otro peso pesado, el intendente de San Isidro Gustavo Posse, quien no dejó que el espacio del vicepresidente eclosione luego de las malas noticias que existen en el ambiente para quien fuera gobernador de la provincia andina.
En rigor, Cobos no goza en su mejor estado anímico, incluso hay quienes destacan que está inmerso en una depresión importante, luego de conocer varios trabajos de consultoras, -entre ellas la de una ligada a un matutino centenario de tirada nacional-, en donde su postulación está en el momento más crítico desde la conocida 125 del campo.
Además, el cobismo bonaerense está sin rumbo, luego de la fuerte interna que protagonizaron el intendente de Junín, Mario Meoni, el diputado Daniel Katz, y el intendente de Pergamino, Héctor “Cachi” Gutiérrez, y del deterioro que sufren Federico Storani y Leopoldo Moreau en sus armados políticos.
En ese marco, y con el fuerte protagonismo de Posse, los aliados cobistas están tratando de retomar a la escena partidaria y no dejar tan fácil el camino a Ricardo Alfonsín, que en este marco aparece como un ganador prácticamente seguro.
Pero los problemas en las filas de Cobos siguen, y la mayoría de ellos se los atribuyen a acciones desafortunadas de su comando “íntimo”, integrado por su secretario privado, Juan Montilla, y sus colaboradores más inmediatos como Juan Antequera, “Dinosaurio” Iglesias, Luly Duarte, José Natali, entre otros.
Por otra parte, se enfrió un poco la postulación del titular de la UCR, senador Ernesto Sanz, debido a que todavía no encontró tantos apoyos como esperaba, y merodea en el ambiente que su armador central será el ex ministro de Economía de la época alfonsinista, Jesús Rodríguez, que a pesar de su corta gestión en el cargo la situación hiperinflacionaria del país explotó hasta límites inciertos.
Sanz, en realidad, pensaba hacerse de más tropa, sobre todo pasando por la ambulancia en los campamentos alfonsinistas y cobistas, pero sin embargo al único que levantó fue a Rodríguez y algún par más.
Todas estas cuestiones tendrán derivaciones fuertes en internas distritales, y no solo la provincia de Buenos Aires tendrá su confrontación, sino que también en la Ciudad de Buenos Aires en donde, por ejemplo, el dirigente radical Marcelo Montero amplificó su apoyo a Alfonsín, tal como lo hizo en la interna anterior aunque ahora, teniendo en cuenta que se trata de una presidencial, redoblando apuesta en territorio.
En las cercanías de Montero dicen que “cuando en el 2001 todos salían corriendo y se metían debajo de la cama, nosotros seguimos y con un partido en el piso no ahorramos esfuerzos y mantuvimos pintada la ciudad a lo largo de muchos años, movilizamos en serio y no hemos sido solo una estrella fugaz, como otros que solo aparecen y desaparecen con la velocidad de los momentos en los que se llega al poder”.
Mientra los precandidatos a la UCR se pelean para ver quién opcupa el lugar de candidato, CFK aumenta su imagen positiva.
En los últimos meses, el estado de dispersión en la UCR revela que las internas venideras serán de alto tono, no solo arriba, en la presidencial, sino abajo, en los principales distritos. Por ejemplo, cabe mencionar en ese marco el caso de La Plata, en donde ya hay en carrera tres nóminas con la posibilidad de una cuarta: el oficialista Sergio Panella; los independientes del Movimiento Alem, con la postulación a intendente del joven abogado Juan Paulo Gardinetti; el mix “cobismo, storanismo” que apoya a Juan Carlos Martín, y posiblemente un postulante del alfonsinismo puro, identificado con Miguel Bazze. Hace apenas unas semanas el oficialismo partidario platense se jactaba de tener “todo cerradito”, en una lista de unidad. Pero los radicales a veces son magos, de una lista hicieron cuatro en un solo acto.
